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DESHACIENDO EL NUTRI-LÍO. CHOCOLATE Y TENSIÓN ARTERIAL.

DESHACIENDO EL NUTRI-LÍO. CHOCOLATE Y TENSIÓN ARTERIAL.

 

¿HAY QUE COMER CHOCOLATE A DIARIO?

Estudios epidemiológicos ponen de manifiesto el control de la tensión arterial y aumento del colesterol `bueno ́ (HDL-colesterol)

Todos los años surge la noticia en los medios acerca de los recientes estudios científicos sobre el consumo de chocolate y sus bondades. Y de nuevo nos vemos en posición de aclarar el “nutri-lío” que se arma cada vez que ven la luz este tipo de estudios a través de noticias `bomba ́. Parece que los médicos ahora recetarán chocolate. Y el estado nutricional de la población seguirá empeorando.

El chocolate tiene teobromina. Bueno, el cacao que contiene el chocolate. Las propiedades bioquímicas de la teobromina son conocidas de hace tiempo. Y se plantea una pregunta; si el cacao tiene teobromina y el chocolate tiene cacao, ¿Bajará la tensión arterial y mejorará el colesterolel consumo de chocolate? Y se hace la prueba en humanos a través de un estudio epidemiológico llevado a cabo por investigadores que hacen muy bien su trabajo. Y resulta: bingo, el chocolate baja la tensión y aumenta el HDL-colesterol. Y lo demuestran en estudios donde existe un consumo diario de cierta cantidad de chocolate que tenga cierta cantidad de cacao.

Y para llevar una dieta sana y equilibrada el consenso científico mundial dice: el chocolate será de consumo esporádico. Y dicen algunas noticias: consumir un poco de chocolate todos los días sería bueno para la salud, en concreto para la tensión arterial y el colesterol. Pues no. No. Y, ¿por qué? Porque tiene más sustancias: azúcar `a porrillo ́ sobretodo. Aunque sea del 60% o 70% que lleva más cacao (que tiene la fantástica teobromina). Y grasas. Y qué grasas. Es muy calórico. Ah, por cierto, el que no lleva azúcar también lo es. Éste está pensado para diabéticos. Bien pensado. El problema es la falsa creencia de que no engorda porque no lleva azúcar. Lo pone la etiqueta nutricional, donde dice las calorías por 100 gramos de producto. Y tiene, vaya si tiene. Y además : surge la costumbre dietética del consumo diario. Mala costumbre. Un experto nutricionista puede prescribir una dieta con un poco de chocolate al día. Y aclarará al paciente: `dietéticamente deberá acostumbrarse a que sea de uso esporádico, se lo dejo un tiempo a diario para que se vaya adaptando a esta dieta hipocalórica y la adherencia al tratamiento sea la mejor posible ́.

Resultado de lo arriba explicado. No se termina con el ambiente obesogénico que vivimos, y el chocolate, forma parte de ese ambiente. Está ocupando miles y miles de estanterías, en la tele, en internet…con fantásticas ofertas. Y oye, a nadie le amarga un dulce. Así que, que vuelva a casa, pero por Navidad. Por Navidad, en un `cumple ́, en una `fiesta ́…de vez en cuando. Antes era manjar de reyes. Ahora no puede pasar a ser el pan nuestro de cada día, porque tendrá (tiene) sus consecuencias. La tensión arterial y el colesterol se controlan de otra forma. El riesgo de enfermedad cardiovascular asociado a la hipertensión es uno de los más importantes quebraderos de cabeza de los sistemas sanitarios de todo el mundo. Y su intervención, y dada una etiología de origen genético en muchos casos y en cualquier caso compleja, requiere de un tratamiento multidisciplinar donde los fármacos, la alimentación global y el estilo de vida en general juegan el papel protagonista. No el chocolate. Los estudios científicos son geniales. Pero no se puede inducir a la confusión de esta forma cuando son transmitidos a través de los medios.

Fdo. Iñaki Villanueva. Servicio de Nutrición y Dietética.

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